Dos integrantes del Santuario de Elefantes de Brasil recibieron sus visas de entrada a Argentina y en cuanto reciban los resultados negativos de la prueba COVID (necesaria para viajar) se trasladarán al Ecoparque de Mendoza para empezar a trabajar de forma extensiva con las elefantas asiáticas.
Karissa y Chrissy, dos cuidadoras del santuario ubicado en Mato Grosso do Sul, también pasarán tiempo trabajando con los otros dos elefantes en Mendoza: Kenia (un elefante africano) y Tamy (un elefante asiático macho). Los cuatro eventualmente serán reubicados en Brasil. Solo Pocha (55 años) y Guillermina (21 años) serán trasladadas en el primer viaje.
Además de las autorizaciones CITES (que ya están en vigor), para transferir un elefante internacionalmente, deben pasar por una cuarentena de 30 días con recolección de sangre y lavados regulares de la trompa.
Pocha y Guillermina aún no están completamente capacitadas en estos comportamientos. Karissa y Chrissy utilizarán el entrenamiento de refuerzo positivo para enseñarles estos comportamientos necesarios.
Tan pronto como Pocha y Guillermina estén capacitadas, comenzarán la cuarentena de 30 días en el Ecoparque de Mendoza. Cuando esto se complete, viajarán al Santuario de Elefantes en Brasil. "Guillermina nació en la planta baja del ex zoológico mendocino, y finalmente tendrá la oportunidad de ver mundo por primera vez", aseguraron del Santuario de Elefantes.
La formación necesaria y la cuarentena requeridas significa que todavía falta al menos ocho semanas para su arribo a Mato Grosso do Sul, posiblemente más.
En cuanto a Tamy, aún se necesita construir los recintos para los machos asiáticos antes de siquiera pensar en transferirlos a SEB. Para que esto suceda, el Santuario de Elefantes de Brasil lanzó una campaña en sus redes sociales para recaudar fondos y lograr reunir el presupuesto que demanda la construcción.
Fuente y foto: Santuario de Elefantes Brasil
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