Mara se prepara para su traslado a Brasil

La elefanta asiática del Ecoparque será transportada en pocos días más hacia el Santuario de Elefantes ubicado en Mato Grosso do Sul, el cual será su nuevo hogar.

Previo al viaje de Mara, el Ecoparque de la Ciudad de Buenos Aires organizó una serie de visitas especiales para que los visitantes pudieran conocer la historia de este ejemplar y despedirla en su nueva etapa. 

Mara nació en la India entre finales de los'60 y principios de los '70

La elefanta hace más de 25 años que está en el ex zoológico, aunque ya tiene 55 años de edad y una historia bastante particular, y a su vez triste. "Mara nació entre finales de la década del ’60 y principios de los ’70 en la India. En ese país, una empresa alemana que se dedicaba a comercializar animales para circos, la compró y la envió a Uruguay", comentó Mariano, uno de los guías educativos del Ecoparque. 

"En Uruguay Mara estuvo en un circo, hasta que este quebró y la elefanta fue enviada a la Argentina, al Circo Rodas, donde estuve durante muchos años. En 1995 queda en el Parque Sarmiento y, por medio de un proceso de judicialización, Mara termina en el ex zoológico de Buenos Aires porque era el lugar más apto o adecuado para recibir a este animal", agregó Mariano. 

Recinto de Elefantes del ex Zoológico de Buenos Aires

Según explicaron, desde 1995 hasta la fecha se intentó que Mara fuera derivada a otro lugar, pero por burocracias del país, leyes, normas, problemas económicos y demás, la realidad es que la elefanta hace 25 años que sigue en ese pequeño recinto de aproximadamente cuatro hectáreas -entre la superficie cubierta y al aire libre-.

"Hoy en día logramos encontrar este lugar en Mato Grosso do Sul, en Brasil, que es un santuario de elefantes asiáticos. Lo que hace este lugar es recuperar animales que hayan estado en circos. Mara donde se va a ir es un espacio donde ya hay otras tres elefantas asiáticas, que ya fueron trasladadas en la misma caja donde ella viajará también", agregó Mariano.

Caja donde será trasladada al Santuario de Elefantes de Brasil

El Santuario de Elefantes de Brasil fue creado en 2013 luego de una gestión de la ONG de conservación Elephants Voices, fundada en Estados Unidos pero que apoya a distintos proyectos en diferentes partes del mundo incluido el país sudamericano.

Una de los cambios más grandes que tendrá Mara en esta nueva etapa de su vida será el espacio. El ex zoológico tiene 18 hectáreas, mientras que el lugar donde se va a derivar a la elefanta en primera instancia tiene más de 25 hectáreas. 

Mara formó parte del Circo Rodas en Argentina hasta 1995

En el sector de 25 hectáreas realizará la etapa de adaptación a su nuevo hogar porque después pasará a otra instancia, donde ya va a estar en un estado mucho más silvestre con más de 1000 hectáreas y estará conviviendo con otras tres elefantas asiáticas. 

Matías, otro de los guías que nos acompañó a esta visita, agregó: "Mara es un animal que siempre estuvo en cautiverio, desde que nació hasta ahora. Si bien ahora se va a ir a un santuario, eso no quiere decir que sea la libertad plena. Si bien en Brasil va a estar un poco mejor, no va a dejar de depender un poco de las personas".

En el Ecoparque comparte recinto con dos elefantas africanas

Esta nueva vida no solo beneficia a la Mara, sino que también beneficiará a las otras ejemplares que comparten el recinto del Ecoparque, Pupi y Kiki, dos elefantas africanas que no salen juntas porque Mara, al ser la más vieja, se pelea con una de ellas y molesta a la otra. 

"Esto se debe a que los elefantes manejan un sistema de matriarcado, donde la hembra más vieja es la que domina. Las primeras en venir al ex zoológico fueron Pupi y Kuki, la primera ejerció dominio sobre la segunda y no había problemas", explicó el guía educativo.

A fines de febrero comenzó su adaptación a la caja transportadora

"Cuando llegó Mara las duplicaba en edad y comenzó a tomar el control, además en tamaño también era más grande que las otras dos. Cuando se notó que se empezaban a molestar entre ellas, se decidió que Mara saliera a la mañana y las otras por la tarde o viceversa", sostuvo Mariano.

Mara va a ser transportada en una caja especial, hace unas semanas comenzó con el proceso de adaptación a la misma. Ella ya está acostumbrada a verla y a ingresar en ella por sus medios y se encuentra en la etapa de cuarentena previa al viaje.

La elefanta viajará monitoreada por veterinarios de Argentina y Brasil

La idea es que viaje despierta, ya que el mismo dura aproximadamente tres días y a lo largo de este tiempo van a ir cuidadores y veterinarios del Ecoparque y del santuario de Brasil que viajarán junto a Mara para monitorearla a través de cámaras que van en la caja, mientras que los cuidadores viajan detrás del camión en autos. 

En la caja, Mara va a tener comida y agua, con interrupciones cada cierto tiempo para controlar que se encuentre bien. "Hay que considerar que no es como una mascota en donde se puede bajar al costado de la ruta para hacer sus necesidades, por eso los chicos tienen que ir limpiando todas las necesidades que vaya dejando Mara, dejándole la comida, ver como está, etc", destacó Mariano.

En Brasil compartirá su nuevo hábitat con otras 3 elefantas asiáticas

La caja tiene algunas características que harán el viaje algo más "llevadero" para la elefanta. En el caso que haga calor se pueden abrir las puertas para ventilación y por las noches, si hace frío, se pueden cerrar nuevamente.

"El viaje es terrestre porque son animales muy grandes como para sedarlos, además no suelen estar mucho tiempo acostados, porque al ser tan pesados podrían aplastarse los órganos vitales como los pulmones, intestinos, etc. Incluso en la naturaleza tampoco pasan mucho tiempo acostados", completó Matías.

Mara seguirá en Sudamérica pero en un nuevo país

Una vez arribada a su nuevo hogar, no solamente van a estar las elefantas asiáticas, sino también las especies nativas de la zona entrando y saliendo del santuario. De más está decir que este santuario, a diferencia de otros en todo el mundo, no tiene acceso al público.

Pero no todo termina en el traslado de Mara ya que existe la posibilidad que el Santuario de Elefantes de Brasil a partir de 2022 puedan recibir elefantes africanos, por lo que en un futuro Pupi y Kuki podrían ser derivadas también a este lugar en Mato Grosso do Sul.

Informe y fotos: Damián Fanelli